En una semana que se tiñe de dolor y tristeza por la partida de nuestro compañero docente, estas son unas palabras que no se pueden dejar pasar.
“José Darío Osorio O. Insigne educador de tiempo completo, infatigable maestro de la rectitud, sembrador de valores y saberes en sus estudiantes a pesar de que en ocasiones le tocase primero corregir a los padres de estos. Gran compañero y mejor amigo que acompaña en la adversidad y en la alegría. Constante ajedrecista e impulsor de esta disciplina y empresario quijotesco de la didáctica matemática.
El Señor Dios te conceda el descanso eterno y a nosotros el consuelo de saber que fuiste grande entre quienes tuvimos la dicha de compartir contigo.
"Con sentido aprecio y resignación”.